La capital del estado de Veracruz es conocida por su riqueza cultural y su aire cosmopolita; su zona centro alberga un sinnúmero de recintos históricos, naturales y culturales como parques, plazas, edificios coloniales, iglesias y callejones. Esta urbe, una tierra de montaña con aire provinciano, es una de las ciudades mexicanas más encantadoras. Un relieve inclinado y una vegetación abundante propiciaron el escenario perfecto para la construcción de numerosas áreas verdes.
La Secretaría de Turismo y Cultura (Sectur) integró a Xalapa dentro de la Región de Cultura y Aventura, donde en unión con otros municipios enaltecen esta zona del #VeracruzIncomparable, llena de riquezas y diversidad.
El Parque Juárez es la plaza principal de la ciudad y el centro de la vida social de la población. La parte sur ofrece una vista panorámica de las montañas de la Sierra Madre Oriental; asimismo, aquí se estableció el Convento de San Francisco, un recinto medieval que fue hogar de eclesiásticos en el periodo colonial. En el jardín central de la plaza abundan los árboles, galerías de arte, talleres y cafés; frente a éste se encuentra el Palacio Municipal, un edificio construido en 1885 en estilo neoclásico.
El Palacio de Gobierno alberga un conjunto de murales pintados por el artista Mario Orozco Rivera; enfrente está la Catedral Metropolitana de la ciudad, que data de 1772, la cual resalta por su fachada amarilla y sus detalles en blanco. Debajo del ParqueJuárez se sitúa el Paseo de los Lagos, cuyos sinuosos senderos atraen a ciclistas, corredores, familias y románticos.
Uno de los atractivos principales de la ciudad es el mundialmente famoso Museo de Antropología, fundado en 1957 y preservado por la universidad local, hoy día alberga 30 siglos de arte e historia y exhibe más de tres mil piezas. Los visitantes encontrarán una extensa colección de piezas precolombinas, seis salas de exhibición y amplias áreas de jardín.
Un recorrido por la historia en un sólo lugar: El Lencero
La Exhacienda El Lencero, una bella casona antigua, ha sido testigo de la historia mexicana durante más de cinco siglos. A sólo 15 minutos de la ciudad de Xalapa se encuentra este recinto construido en el siglo XVI, rodeado por frondosos jardines. Cuenta con una arquitectura y decoración coloniales que llaman la atención por su excelente estado.
El primer dueño de esta mansión fue un soldado de Hernán Cortés, quien la convirtió en una posada de descanso para los viajeros que llegaban del puerto de Veracruz. En el siglo XVII se convirtió en un molino de azúcar y en 1842 fue adquirida por el general Antonio López de Santa Anna, quien dos años después contrajo matrimonio en su capilla; durante 14 años, El Lencerofue propiedad del 11 veces Presidente de la República.
En 1856 el gobierno mexicano embargó los bienes de Santa Anna y El Lencero se puso de nuevo a la venta. Durante unos años sufrió pérdidas, saqueos y destrucciones, sobre todo mientras transcurrió la Guerra de Independencia de 1910, pero en 1935 un hombre compró parte de la propiedad y la restauró.
En el siglo XX, este lugar se convirtió en el hogar de la afamada poetisa chilena Gabriela Mistral, quien vivió allí durante uno de sus exilios. De hecho, la autora le dedicó un nostálgico poema de despedida que se puede leer en una placa fijada en el jardín. Hoy día convertida en un museo, la exhacienda es un destino obligado para los viajeros interesados en la historia mexicana.
El recinto cuenta con una amplia colección de muebles y utensilios propios de la época. Al fondo, en el patio, se erige una enorme higuera entre árboles, arbustos y flores. Al frente, una calzada donde se alinean frondosos laureles da la bienvenida a los visitantes; también se encuentran una capilla colonial, una parroquia y un pequeño lago.
Alternativas verdes
El Jardín Botánico Francisco Javier Clavijero es una extensa área verde que aloja más de 700 especies de plantas típicas de la región; además, aquí se establece una plantación de café. Desde 1975, este espacio se dedica al estudio, la protección y difusión de la fauna de Xalapa y sus alrededores. Recorrer sus senderos, admirar especies de plantas y flores exóticas y escuchar el trinar de las aves es una grata experiencia para los sentidos.
Los Tecajetes es otro parque ubicado en el centro de la ciudad, se encuentra en un barranco y cubierto por vegetación de bosque de niebla, típica de la región. Atraviesa el parque un manantial de agua fresca que alimenta los acueductos, canales y las albercas artificiales. Otra alternativa es el Parque EcológicoMacuiltépetl, popular por las bellas vistas que ofrece.
Una opción más es el Parque de Los Berros, el más grande y antiguo de la ciudad; su quiosco, áreas verdes, juegos infantiles, puestos de comida, un trenecito que lo recorre y las ferias que se establecen con frecuencia lo vuelven una excelente alternativa para pasar un día en compañía de la familia.
En lugar que no puedes dejar de visitar es el Barrio de Xallitic, donde se estableció un grupo de totonacas procedentes de Naolinco durante la Colonia. En el siglo XVIII se construyó una cisterna para recoger el agua del manantial, después se edificó el templete del manantial, que consta de un muro con una cruz calada en bisel en lo alto, en su parte central tiene una hornacina-fuente de donde brota el agua que surte a los lavaderos.
Actualmente, sobre la vieja construcción se levanta un pesado puente construido a mediados de este siglo para sortear la barranca que ahí se asienta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario